I Aniversario del Partido Nacional Hispanista: un año de lucha, un destino de Hispanidad

El 10 de octubre de 2024 marcó el nacimiento oficial del Partido Nacional Hispanista (PNH), fruto del esfuerzo de quienes se negaron a aceptar la disolución de nuestra identidad en el torbellino globalista. Aquel día, una idea tomó forma política, un ideal se encarnó en acción y una causa antigua volvió a hablar con voz nueva: la causa de la Hispanidad.

Un año de siembra y de combate

En este primer año de vida, el PNH ha demostrado que no es una anécdota ni una nostalgia, sino una convicción viva. Ha surgido una comunidad entre jóvenes y mayores, entre españoles e hispanoamericanos, entre creyentes y patriotas que reconocen en la Hispanidad algo más que una palabra: una misión histórica y espiritual.

  • Se ha defendido la Fe Católica como raíz y brújula moral de nuestra civilización.
  • Se ha afirmado la unidad cultural y espiritual de los pueblos hispánicos frente a las fronteras artificiales del materialismo moderno.
  • Se ha recordado que la libertad verdadera no nace del consumo ni del mercado, sino del deber, la virtud y el amor a la Patria.

El PNH ha hecho oír su voz en las redes, en las aulas, en los foros y en las calles. Ha reavivado la conciencia de quienes saben que la decadencia no es destino, y que aún hay en el alma hispana una reserva de grandeza capaz de restaurar lo perdido.

La Hispanidad: una alternativa al mundo moderno

Vivimos tiempos de crisis profunda: el hombre moderno se halla desarraigado, confundido, reducido a consumidor de su propia soledad. Las naciones, sometidas al poder financiero y a las ideologías sin alma, pierden su soberanía, su fe y su sentido trascendente.

Frente a esa oscuridad, la Hispanidad es luz. No como un mito pasado, sino como una civilización viva, un proyecto de hermandad entre pueblos que comparten sangre, idioma, religión y destino. La Hispanidad propone al mundo un orden nuevo: donde la técnica sirva al espíritu, la economía al bien común y la política a la dignidad del hombre.

Esa es la misión del Partido Nacional Hispanista: reconstruir la comunidad hispánica desde sus cimientos, unir a las naciones dispersas en torno a su herencia común y devolver al pueblo hispano su conciencia de sí mismo como protagonista del porvenir.

Un año no es el final: es el comienzo

Este primer aniversario no es una meta alcanzada, sino una declaración de perseverancia. Lo que el PNH ha hecho en su primer año es sólo el prólogo de una empresa mayor: la restauración moral, cultural y política de la Hispanidad.

Nos guía una certeza: que la historia no ha terminado, y que el alma hispánica aún tiene algo que decir al mundo. Nos mueve una fe: que ningún poder terrenal puede destruir la verdad cuando esta arde en los corazones de los hombres libres. Y nos anima una esperanza: que algún día, bajo una misma bandera espiritual, los hijos de España y de América vuelvan a reconocerse hermanos.


Un año de lucha. Un destino de Hispanidad.

El camino continúa. Porque la misión del PNH no es efímera: es histórica. Y porque, como enseñaron nuestros mayores, la Hispanidad no muere: resurge.

¡Por la Hispanidad, por la Patria, por el futuro!

Viva la Hispanidad. Viva el Partido Nacional Hispanista. Viva Cristo Rey.